"En la Misión de San Leonardo de Collipulli, a seis días del mes de Setiembre de mil ochocientos ochenta y cinco, bauticé, puse óleo y crisma a María Mercedes, de nueve días, hija legítima de José de la Cruz Acuña i de María Mercedes Navarrete. Padrinos José Manuel Díaz y Josefa Mellado. De que doi fe. Fr. Domingo A. Carrasco".
Así rezan las inscripciones del bautismo recibidos por este hermano y hermana de mi abuelo paterno José de la Cruz Acuña Navarrete, nacido este último en el año 1891. Aparentemente, los dos primeros de los nombrados son los únicos hijos de mis bisabuelos nacidos en la localidad de Collipulli. La época de sus llegadas a este mundo, en aquella región de Chile, está relacionada con el esfuerzo que hacía el Gobierno de la República de Chile por incorporar definitivamente a la nación un vasto territorio, al que se le denominó Araucanía, mediante el remate de hijuelas de grandes dimensiones en tierra virgen, la colonización y el proyecto, trazado y construcción del ferrocarril hacia más al Sur. Para el año 1885 la familia Acuña Navarrete ya tenía tres hijos, ya que aproximadamente en el año 1881 ya había nacido María Ercira.
Francisco Javier y su hermana mayor, María Ercira, crecieron en Collipulli hasta aproximadamente el año 1884, pues cuando mi bisabuelo José de la Cruz Acuña Urrutia inscribe en el Registro Civil de Angol a su hija María Mercedes, señala que ésta había nacido en Septiembre de 1885 en la localidad de Victoria, unos 40 kilómetros más al Sur, en donde también nació y falleció María Trinidad (1889). Posteriormente, tras residir en aquella recientemente fundada localidad, al alero del fuerte militar, por alrededor de unos diez años, aparentemente cambiaron su domicilio nuevamente más al Sur, a unos 66 kilómetros, a la ciudad de Temuco, por el año 1895. Hacia el año 1903 mi bisabuelo recibe una hijuela en la Colonia Nuevo Transvaal de Gorbea, unos 45 kilómetros al Sur de Temuco.
Francisco Javier y su hermana mayor, María Ercira, crecieron en Collipulli hasta aproximadamente el año 1884, pues cuando mi bisabuelo José de la Cruz Acuña Urrutia inscribe en el Registro Civil de Angol a su hija María Mercedes, señala que ésta había nacido en Septiembre de 1885 en la localidad de Victoria, unos 40 kilómetros más al Sur, en donde también nació y falleció María Trinidad (1889). Posteriormente, tras residir en aquella recientemente fundada localidad, al alero del fuerte militar, por alrededor de unos diez años, aparentemente cambiaron su domicilio nuevamente más al Sur, a unos 66 kilómetros, a la ciudad de Temuco, por el año 1895. Hacia el año 1903 mi bisabuelo recibe una hijuela en la Colonia Nuevo Transvaal de Gorbea, unos 45 kilómetros al Sur de Temuco.
Francisco Javier contrajo matrimonio en el año 1906, en la oficina del Registro Civil de Pitrufquén (unos 15 kilómetros al Norte de Gorbea), con Abdolina Isla Bravo, con quien tuvo varios hijos, entre los cuales estaban Luis Heriberto (1908), Francisco Segundo (1911) y Héctor (1914).
En el año 1908, el Inspector de Colonización encuentra residiendo en la hijuela a la familia Acuña Navarrete, con Francisco Javier, su hermano José de la Cruz y otras cinco personas, como lo indica el informe del Inspector. Francisco Javier tenía en ese entonces 24 años de edad y mi abuelo José 17 años. Ya no residían allí sus hermanas María Ercira (fallecida en Temuco en enero del año 1903), ni María Mercedes.
Francisco Javier se dedicó al comercio, residiendo en el pueblo de Gorbea, debiendo haber conocido a mi tío abuelo Domingo Aguilera Lagos, quien era su concuñado, por estar casado con una hermana de Abdolina Isla, esposa de Francisco.
En el año 1915, al efectuarse la partición de los bienes quedados al fallecimento de mi bisabuela María Mercedes Navarrete, sólo comparecen mi bisabuelo, mi tío abuelo Francisco Javier y mi abuelo José de la Cruz Segundo. Después de aquello, se pierde la pista de Francisco Javier y de su esposa, quienes a la fecha habían visto fallecer a todos sus hijos.